Caso práctico 1:
Educación Primaria
En el primer caso práctico, vemos la historia de Adrián, un niño tímido en sexto de primaria que presenta dificultades para relacionarse con sus compañeros del nuevo colegio. Como resultado de un cambio de ubicación del negocio familiar, Adrián se pierde la relación con su pequeño grupo de amigos del colegio anterior y sufre de acoso, en mi opinión, porque está expuesto a lo largo del tiempo y de forma repetida a acciones negativas por parte de sus compañeros, especialmente uno en particular. Son conductas directas de tipo verbal y físico. El desequilibrio de fuerza de tipo social que es ejemplo de acoso: Adrián es un niño tímido, con dificultad para hacer amigos, con falta de habilidades sociales y se encuentra rechazado del grupo, frente a Félix, que tiene el apoyo de la mayoría de compañeros de clase. También se puede ver una intencionalidad por parte de Félix y el resto de alumnos y las acciones se presentan a lo largo de unos meses después de las vacaciones de Navidad.
En el primer caso práctico, vemos la historia de Adrián, un niño tímido en sexto de primaria que presenta dificultades para relacionarse con sus compañeros del nuevo colegio. Como resultado de un cambio de ubicación del negocio familiar, Adrián se pierde la relación con su pequeño grupo de amigos del colegio anterior y sufre de acoso, en mi opinión, porque está expuesto a lo largo del tiempo y de forma repetida a acciones negativas por parte de sus compañeros, especialmente uno en particular. Son conductas directas de tipo verbal y físico. El desequilibrio de fuerza de tipo social que es ejemplo de acoso: Adrián es un niño tímido, con dificultad para hacer amigos, con falta de habilidades sociales y se encuentra rechazado del grupo, frente a Félix, que tiene el apoyo de la mayoría de compañeros de clase. También se puede ver una intencionalidad por parte de Félix y el resto de alumnos y las acciones se presentan a lo largo de unos meses después de las vacaciones de Navidad.
La tutora
de Adrián no mostraba sensibilidad hacia las preocupaciones de los padres al
ver que iba al colegio triste y sin ganas.
La tutora menosprecia las preocupaciones, comentando que es un caso común,
sin mucha importancia porque es un niño serio que acaba de cambiar de colegio. La tutora debería haber preocupado más por la integración de
Adrián en el colegio y con sus compañeros. Tenía que haber sido más dispuesta a ver si
Adrián estaba bien y así evitar el sufrimiento, ansiedad y la pérdida
de autoestima. Su falta de discreción
también se veía cuando informaba a los
alumnos de la visita de los padres de Adrián cuando acusaba al acosado de ser
el responsable de no integrarse sin más.
Dejando la situación aumentar como ¨cosa de niños¨, la tutora ignoraba
su responsabilidad de crear un ambiente de bienestar para el alumno y permitía
la proliferación del acoso. Encima, el Jefe de Estudios culpa a
Adrián por lo ocurrido y ve como una molestia las entrevistas con los
padres. Como
resultado, Adrián sufría ansiedad y la pérdida de autoestima.
Los
miembros de la comunidad educativa deberían proporcionar los medios recursos
necesarios para que los alumnos confíen en los adultos y no se
queden callados para así poder solucionar el acoso lo antes posible, el tiempo
no lo soluciona. En la escuela este labor empieza en
el aula y debe partir del tutor, que debe llevar a cabo un Plan de Acción
Tutorial que contiene actividades y medidas para que el clima afectivo de la
clase sea favorecedor a todos los alumnos, fomentando los alumnos a respetar, a
escuchar, a entenderse, a empatizar, a resolver conflictos mediante el diálogo
y la comunicación. Si no se disuelve un
conflicto con el PAT, se deberían poner en práctica las sanciones
correspondientes que estuvieran reflejadas en el Reglamento de Régimen Interno,
activando el Protocolo de Intervención si siguen.
Creo que
la prevención es imprescindible en casos así, desafortunadamente historias de
este tipo son tan comunes en estas edades, pero es importante que los niños sean
capaces de empatizar, de reconocer lo que está bien y diferenciarlo de lo que
está mal, y de prestar ayuda al que lo necesita. También necesitan un
ambiente educativa que se aprecia y reconoce las muestras de respeto y de
dialogo.
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